También conocidas como casas de consumo casi nulo, son unas viviendas pensadas, diseñas y construidas para garantizar el mínimo consumo de energía consiguiendo el mayor confort interior. No necesitan productos ni materiales específicos sino una optimización de los recursos pasivos y su metodología es aplicable a cualquier otro espacio, como por ejemplo bares, restaurantes, hoteles, etc.

Per Se arquitectura es un estudio con certificado oficial del Passive House Institute.

Para conseguir una vivienda de consumo casi nulo se debe diseñar y construir pensando en minimizar las pérdidas energéticas e incorporando estas cinco características:

Aislamiento térmico Passivhaus

Consiste en aplicar una capa de aislamiento continua en toda la envolvente (fachadas, cubiertas y suelo) y es beneficioso en cualquier época del año, ya que reduce las pérdidas de calor en invierno y evita que entre el calor en verano.

Ventanas y puertas de altas prestaciones

Son los puntos más débiles de la envolvente de la vivienda, una buena orientación de las ventanas permite aprovechar el sol en invierno y en verano un buen control solar para evitar el sobrecalentamiento en el interior.

Libre de puentes térmicos

En el perímetro de las puertas y ventanas, concretamente en juntas y esquinas de la vivienda se producen pérdidas de energía reduciendo la temperatura en el interior de la estancia. Estos puentes térmicos pueden provocar incluso la aparición de moho. La suma de todos ellos equivaldría a tener un agujero de 60 x 60 cm en la pared en una vivienda convencional.

Hermeticidad Passivhaus

Para garantizar un ambiente interior confortable no debe existir ninguna transferencia no deseada entre el interior y el exterior, por lo que la correcta hermeticidad de la vivienda se consigue realizando la prueba de presión (ensayo de Blower Door o puerta de aire) mediante la cual se introduce y extrae aire del interior para detectar las posibles fugas.

Sistema de ventilación con recuperador de calor

El aire exterior es filtrado y precalentado aprovechando el calor desprendido por los electrodomésticos, obteniendo así una calidad de aire permanente en el interior libre de contaminantes, polen, polvo e impurezas del exterior.

Ahorro energético entre el 70-90% respecto a una vivienda convencional.

La inversión inicial para las casas de consumo casi nulo varía entre un 8-15% más que una vivienda convencional, pero este capital es amortizable a partir del decimo año, ya que la “hipoteca energética” es casi nula.

¿Se puede aplicar a reformas de viviendas?

La metodología Passivhaus es aplicable tanto a reformas de pisos como a rehabilitaciones de bloques enteros de viviendas; su equivalente en este caso es el método Enerphit.

Puedes pedir más información sobre las casas de consumo casi nulo sin ningún compromiso.